Valencia es hoy en día una de las pocas ciudades que cosen a mano aún el espolín, el tradicional tejido floral y de seda que compone los trajes de fallera. Pero en riesgo de desaparecer al carecer de relevo generacional, por lo que Amstel ha decidido impulsar su herencia cultural con el llamado Movimiento Espolín.
Una serie de acciones encaminadas a poner en escena la cultura sedera, con su máximo exponente en forma de Espolín Collection. Una línea de productos creada entre diferentes creativos y artesanos valencianos con la tela como protagonista. Entre los que se encuentra Héctor Serrano con un altavoz portátil y una lámpara, Lola Cruz con unas zapatillas unisex, Ana Illueca con diferentes piezas minimalistas, Ribags con una mochila, Closca con su casco Fuga y Adrián Salvador a través de Siemprevivas con una gorra y una chaqueta.
Pero además, el movimiento también se complementa con la creación de un programa de estudios y becas para contribuir al relevo generacional entre los escasos artesanos que hoy día aún son capaces de realizar este tejido. Completando así todo el proyecto y revalorizar la rica herencia sedera de las Fallas.