Jonah Hill, el salvador del streetwear

Salvo que hayas estado desaparecido de la faz de la tierra los últimos años -o no sigas el Twitter de Four Pins, que a efectos es lo mismo- no te cogerá por sorpresa si decimos que Jonah Hill es el hombre del momento. Tampoco si has leído alguno de los múltiples perfiles en cualquier tipo de medio que ponen a este actor a la altura de icono de la moda. No contamos nada nuevo. Pero es necesario recalcarlo. Hill es la quintaesencia de la moda en lo que se refiere al urbanita moderno.

¿Pruebas de esta afirmación? La primera semana de septiembre, Jonah Hill fue fotografiado de compras en Balenciaga mientras vestía una camiseta de Mitchell & Ness de los Phoenix Suns metida por dentro de sus pantalones, en una especie de outfit casi allblack. Curiosamente, la foto coincidió con su nominación como uno de los hombres mejores vestidos de 2018 por Vanity Fair.

Jonah Hill representa todo lo que está bien con el streetwear si tienes más de 25 años y nunca has mencionado la expresión «pikete de Off-White». Clase urbana, estilo propio, guiños a las calles (aunque con una excesiva tendencia a abusar de Palace, marca de la que es embajador todo sea dicho) y una siempre eterna capacidad de sorprender, tanto por exceso como por sobriedad.

Seguramente en los últimos meses haya llegado a ti la expresión scumbro, que viene a definir esa especie de feísmo que se ha instalado con especial fuerza entre las celebridades. Vestir aparentemente mal para los ojos de la sociedad y lo normativo, pero tremendamente bien para las nuevas generaciones, reddit, adictos a ‘cuánto vale tu outfit’ e Instagram en general. Looks en apariencia descuidados pero caros en esencia y muy estudiados. Una especie de athleisure grunge.

Algunos han definido a Hill como scumbro y no podrían estar más equivocados. Jonah es todo lo contrario a un scumbro. Su estilo no es fakecareless, sino que es frontalmente estudiado (y aceptado) y no se inspira en nuevas tendencias, sino que descansa sobre los atributos clásicos y formales de la elegancia y el estilo masculinos. Aunque con constantes guiños a las nuevas tendencias, el actor respira elegancia: no da la impresión de haberlo intentando con demasiadas ganas.

Jonah Hill es el mesías para todos aquellos que pasan de la treintena y quieren y aceptan su edad, sin caer en formalismos o aburrimientos ni negarse a crecer. Para los que están a un par de años de empujar un carrito de bebé pero todavía siguen saliendo a quemar la ciudad un fin de semana. Para los que tienen responsabilidad de alto ejecutivo pero no se toman lo suficientemente en serio como para asumir que se han vendido al capital a través de dedicar su vida a una profesión liberal.

Pero más allá de lo que pueda representar Jonah Hill a nivel estético, su subida a los altares de la moda masculina es, sobre todo, una historia de superación y éxito al estilo americano. Una evolución tanto exterior como interior. De personaje cómico a creador total y protagonista siempre de un absurdo, aburrido y asqueado debate sobre su peso, acaba de presentar en la escena festivalera ‘Mid 90s, su debut como director en el que cuenta la historia de un adolescente que escapa de su vida a través del patín. A falta de su estreno, ya ha cosechado comentarios positivos por parte de las críticas especializadas.

Quizás uno de los aspectos que más podemos destacar de esta especie de salvador de la moda moderna y urbanita es que su acierto es absoluto. Hill sería la clase de persona en tu oficina a la que envidiarías por su forma de vestir, o con la que te girarías por la calle para repasar su outfit y, a la vez, es una de las celebridades que ha conseguido ser un icono de la moda entre sus pares, en un universo gestionado por los Rocky, Bieber o Tyler de turno.

Aunque si tuviésemos que destacar tan sólo un aspecto por el que queremos a Hill, sin duda sería su actitud completamente careless y su polivalencia. Bien sea con looks de estética skater 100 % (bien de Palace, de dad caps y pantalones shoes), bien con apuestas más formales (trench coats y pantalones), bien combinando los dos mundos o yéndose todavía más lejos (pelo teñido de rosa, camisetas tie-dye), el actor nunca parece estar fuera de lugar.

Rey de la moda, protagonista de un día en su honor y sempiterno amigo del Twitter de Four Pins, sin duda Jonah Hill es todo lo que le podemos pedir al hombre moderno en materia de moda. Larga vida a Jonah Hill.

 

Al Sobrino