Tomando su nombre de una de las especies de orquídeas más misteriosas y llamativas, Orquídea Drácula se alza en pleno callejero madrileño como un laboratorio floral de nueva generación. Que además de albergar en su interior una floristería al uso (incluyendo pedidos online), reimagina un negocio tan clásico hasta acabar adaptándolo a las nuevas generaciones. Tirando de interiorismo, estética y una evidente especialidad en las orquídeas.
Además, pese a su reciente inauguración, ya está en la mente de su creador la creación de colecciones especiales dependiendo de la época del año (plantas, flores y accesorios), la customización mensual de su escaparate junto a diferentes artistas y continuar aumentando su colección de jarrones traídos de toda España. Todo con el fin de que cualquier elemento encaje en el espacio y traiga de nuevo a Madrid esa pasión por comprar o regalar flores.
