Top 10 del 2019 para el fotógrafo Pablo Alzaga:
1. Romperme/operarme la rodilla.
El año empezaba de la peor forma posible. Tras una lesión en un partido unas semanas anteriores, el 31 de diciembre de 2018 recogía unos resultados completamente inesperados: rotura de LCA (ligamento cruzado anterior) y menisco de la rodilla izquierda. Nada “top”, a priori, pero que me ha dado uno de los mayores aprendizajes de mi etapa adulta: he aceptado que la vida es una sucesión de rutinas e imprevistos.
2. París.
Anticipando el parón inminente, pasé los 10 días anteriores a la operación tirando fotos en París. Regresé a los barrios donde allá por 2013 y 2014 decidí qué clase de fotógrafo quería ser y volví a España con un disco duro lleno de material.
3. La órtesis.
a.k.a el mejor accesorio de 2019.
4. Revisar mi archivo fotográfico.
Una rehabilitación tan larga da mucho tiempo para pensar, estudiar y cuestionar todo en lo que crees. Entre otras muchas cosas, me propuse reorganizar todo mi archivo fotográfico. Este orden dio como resultado mi nuevo portfolio pabloalzaga.com.
5. La rehabilitación en el norte.
Todo cura mejor frente al mar.
6. Reencontrarme con la fotografía en Oporto.
Hace unas semanas en una noche de juerga, ya con una cerveza sin alcohol en la mano, El Pablo decía: “Lo mejor que ha hecho Pablo Alzaga en 2019 son unas fotos en Oporto”. Un carrete y medio disparado en vacaciones. Exagerado o no, lo cierto es que hay algo especial al observar y fotografiar para uno mismo —y fotografiar feliz, también. Yo no sé hacerlo de otra forma.
7. La lista de los 100 sitios.
Sandra es mi luz de 2019. Solo en Madrid, hemos visitado más de 100 garitos/bares/restaurantes este año. Yo no entiendo la vida si no es alrededor de una mesa (y menos si es sin ella).
8. El primer gol.
El día 17 de noviembre, 8 meses después de la operación y casi un año desde el último partido, volvía a jugar con mi CCP LATIGO. Una sensación indescriptible para quien ame el fútbol tanto como lo amamos nosotros. Doblete incluido.
9. El último trimestre del año.
El propio 2019 sentía que me debía algo y así me lo ha hecho saber en los últimos meses del año. Oporto, el AMF de Barcelona, Transilvania, las rutinas, Ibiza, LATIGO, Viva Belgrado, el fútbol o el X aniversario de 25 Gramos… una racha personal y profesional de la que estoy muy agradecido.