El pasado 14 y 15 de junio, Paraíso Festival cerró su segunda edición terminando de confirmar lo que muchos ya sospechábamos: se trata de uno de los mejores festivales de la capital y de una cita ineludible para los amantes de la electrónica de todo el territorio nacional.
Con un 40% más de asistentes que en 2018, queda claro que Paraíso cuenta ya con un público fiel no solo a su notable y variada programación, sino a su cuidada organización, su escenografía, su gran ambiente y su amplia propuesta gastronómica y artística, elementos que normalmente se dejan de lado en otros festivales.
Este año el cartel contaba con 49 actuaciones de artistas repartidos en cuatro escenarios, uno de los cuales ofrecía una programación dedicada únicamente a artistas locales. Y es que ese es, precisamente, otro de los puntos fuertes de Paraíso Festival: su capacidad de perfilar un line-up encabezado por algunos de los nombres más reputados de la escena, pero con gran presencia de artistas emergentes o desconocidos para el gran público.
El escenario Paraíso vio actuar a titanes como Maribou State, Charlotte Gainsbourg, Polo & Pan, Cerrone, Mount Kimbie o Laurent Garnier que, como era de esperar, protagonizaron algunos de los highlights más memorables del fin de semana. Por su parte, la cúpula del escenario Club acogió los eclécticos Dj sets de talentos como Moscoman, Ross From Friends, Carista o la sensación de la escena electrónica Peggy Gou, que consiguieron mantenernos en trance a golpe de beats. A pesar de ser más pequeño que los dos anteriores, el escenario Manifiesto nos regaló actuaciones tan remarcables como las de Nicola Cruz, Young Marco, Motor City Drum Ensemble o Antal, que superaron todas las expectativas y fueron los responsables de crear algunos de los viajes sonoros más épicos del festival.
Incluso con el notable aumento de asistencia respecto a la pasada edición y a pesar de algunos problemas técnicos, una vez más Paraíso hizo gala de su logística y organización en un evento que ya se postula como una de las propuestas más interesantes de la capital para aquellos que buscan, además de una exquisita selección musical, una experiencia donde se cuida hasta el más mínimo detalle.
