TAG Heuer estrena su vuelta a la Formula 1 reflotando el modelo del mismo nombre a través de nueve reediciones que reinterpretan uno de sus relojes más emblemáticos de la década de los 80. Con un diseño de 38 milímetros, acabados en acero arenado y tratamiento DLC, destacando por la innovadora mecánica Solargraph alimentada por luz.
La colección base está formada por relojes en negro, azul y blanco con brazaletes de acero, y se completa con seis ediciones limitadas en combinaciones de colores vivos. La silueta mantiene la esencia original de la colección de 1986 con algunas mejoras ergonómicas, índices con Super-LumiNova y manecillas mejoradas para la legibilidad.
El movimiento Solargraph es capaz de recargarse con solo dos minutos de exposición solar para funcionar todo un día y ofrece hasta 10 meses de autonomía y una vida útil de 15 años.