Digo ‘Arriba España’ pero no desde una posición política, sino desde un cariz social y cultural. Siento en mi fuero interno que desde hace unos años está empezando el nuevo ‘Siglo de Oro Español’ y tenemos como abanderada a mi querida Rosalía. Sí, Rosalía, quien lleva el valor inefable de ser español por bandera y lo luce con orgullo.

Hablando desde la experiencia, empezar en este país no es fácil para nadie ni tampoco para un creativo. Las trabas tanto burocráticas como económicas y, sobre todo, la carencia de apoyo institucional lo convierte en un deporte de riesgo.  Sin embargo, éste es un país lleno de locos creativos y como dice Kerouac en ‘On the road’: “La única gente que me interesa es la que está loca, la gente que está loca por vivir, loca por hablar, loca por salvarse, con ganas de todo al mismo tiempo, la gente que nunca bosteza ni habla de lugares comunes, sino que arde, arde como fabulosos cohetes amarillos explotando igual que arañas entre las estrellas.”

Doy gracias a vivir entre un círculo de españoles locos, tan locos como para lanzarse a una piscina sin agua.

Cuando digo que es una ardua tarea, lo comulgo. Recuerdo cuando empecé hace siete años y únicamente me abrió las puertas Mr. David Lynch en su exclusivo club privado en París. Allí conseguí hacer mi primer evento y gracias a que ellos vieron algo en mí, pude hacerme un pequeño hueco en España. Desgraciadamente, aunque seas un rey en España, nunca serás apreciado hasta que los demás te señalen con el dedo y te reconozcan como rey.

Fotografía: Adrià Cañameras para A Flamenco Catharsis

En esta vorágine de talento no puedo únicamente darle crédito a Rosalía, quien creo de verdad que está poniendo de moda el ser español. Desde mi pequeño ‘guetto’ de la moda quiero destacar a todos mis compañeros con marcas independientes como Reparto, Compte, Outsiders Division, Reveligion y Crack, entre otros.

Debemos recordar que el creador de la maravillosa pintura -vestido que se hizo viral en el desfile de Coperni fue creada por el español Manel Torres, o Paula Ulargui, quien ayudó a crear los diseños de césped y multipantalla a JW Anderson para Loewe.

Tenemos músicos maravillosos de diferentes géneros como Guitarricadelafuente o La Plata. Artistas plásticos como Carlos Sáez, Alex Marco o Teresa Aboud, quien acaba de participar en la Bienal de Venecia. Gente con opinión y criterio como Marta D. Riezu. La lista podría ser infinita, pero mi intención es ir mostrando a todos nuestros creativos y digo nuestros con orgullo.

Hace unos días, hablando con mi maravillosa ‘hairstylist’, Carla Cirujeda, me contaba que cuando vivía en París se dio cuenta de que todas las parisinas querían ser nuestra Penélope Cruz. Nos odian porque quieren ser nosotros, envidian nuestra estética, pero también nuestra libertad, nuestro carácter desenfadado y poético.

Fotografía: Camila Falquez

Este año es el momento de reivindicarnos, sentirnos orgullosos de ser la tierra de Goya, Federico García- Lorca, Camarón, Ouka Leele, Isabel Coixet y Cristóbal Balenciaga.

Siento un hastío enorme cuando escucho a gente a mi alrededor criticar el trabajo artístico de otra persona sin ningún tipo de objetividad o criterio. Las críticas no constructivas no llevan a nada más que al odio. Normalmente, este tipo de personas suelen tener carencias, no creen en su obra y tienen miedo de que el éxito ajeno les haga sombra.

Voy a daros un consejo: los artistas seguros de si mismos no se comparan, no hunden a sus coetáneos, sino que los apoyan.  Cada uno crea desde su visión única “Nosotros no vemos las cosas como son, vemos las cosas como somos nosotros” – Anaïs Nin.

Así que con este artículo hago un llamamiento a todos los locos, unamos fuerzas, empecemos la nueva revolución cultural, un nuevo Siglo de Oro. Todos a una Fuenteovejuna.

 

Anaïs Vauxcelles