Böse: Homenajes, conexiones y el valor de los errores
Si has visto algo de Böse, probablemente hayan sido sus trucker hats. Este accesorio también fue mi entrada a la marca, aunque lo que hizo que no la perdiera de vista fue la transparencia con la que señala sus referentes a la hora de construir su identidad creativa.
Hablo con Albert Sesé, fundador de la marca, para indagar en el nacimiento de la misma, conocer su opinión sobre los bootlegs y saber lo que esconde su próximo e inminente drop, entre otras cosas.
¿Quién forma Böse? ¿Qué background o estudios tienen?
Böse, como tal, solo soy yo. Tengo un círculo que me ha ayudado muchísimo en todo en lo que he necesitado, aunque detrás del diseño, gestión y envío de los paquetes solo hay una persona. Soy de Barcelona, exactamente de Sant Andreu, y desde pequeño siempre me ha interesado la ropa.
En cuanto a estudios, estoy acabando la carrera de diseño de moda y todos los conocimientos de fotografía, edición y diseño gráfico han sido de manera autodidacta.
¿Cómo nació Böse?
Desde que descubrí Supreme y toda la escena del streetwear a los 14 años quise tener mi marca de ropa pero no sabía cómo nombrarla hasta varios años después. Aún así, siempre compartí la idea con mis amigos de querer poner ropa a la venta.
Cuando llegó mi 17 cumpleaños, ellos me regalaron la primera sudadera de Böse, pero hasta 2020 no hice nada público. Finalmente, fue el 27 de octubre de ese mismo año (coincidiendo con mi cumpleaños) cuando salió a la venta el primer drop.
Qué es más importante para Böse a la hora de convertir a ventas, ¿un buen producto o una buena estrategia de comunicación?
Creo que es un mix de ambas: hay que tener buenos productos para vender pero también necesitas que la gente sepa lo que estás vendiendo. Es por eso que creo que la comunicación es muy importante para que los clientes puedan conectar y entender la marca, pero sin unos buenos productos nadie volvería a comprar. Se debe encontrar el balance entre ambos.
¿Cuáles son las influencias detrás de Böse?
Como ídolos y referentes sería una lista infinita pero Kanye West, A$AP Yams y Gab3 irían en cabeza. Aunque como marca y modelo a seguir: FuckThePopulation. No es una marca pequeña, pero no tiene ni una décima parte de la exposición en redes que tienes todas las marcas que están a su nivel y aun así en todos los drops hacen sold out. Más que seguidores o fans tienen un culto, gente que tiene el armario lleno solo de FTP y eso es a lo que aspiro como marca.
Algunos diseños de Böse, como la gorra con el monogram de Balenciaga o el 2024 de Kanye, recuerdan directamente a otros diseños, ¿cuál es el motivo detrás de estos bootlegs/homenajes?
Sí. «La imitación es la forma más sincera de admiración” (Oscar Wilde). Para mí los bootlegs son un paso más. Lo considero el halago máximo: me gusta tanto esto que has creado, que necesito versionarlo para que sea de alguna manera también mío. Ya sea hackear el hacker project de Gucci y Balenciaga o “apoyar” la campaña de presidencial de Kanye West.
Lo comparo con el metro y los grafiteros. El tren es del Estado pero en el mismo momento en el que termina la pieza, ese vagón es “suyo”.
Hay un drop programado para el 12 de enero, ¿puedes contarnos más sobre la inspiración detrás de las bomber jackets?
Love Letter To Raf es un pequeño homenaje, a mi manera, a los mejores años de la carrera de Raf Simons.
Las bombers en las que me he inspirado son a día de hoy una de las mayores piezas de la moda masculina, a pesar de que cuando salieron a la venta llegaron a rebajas y nadie las compraba. Con los años las han llevado Drake, Rihanna, Kanye West…y se han llegado a vender por 47.000 dólares.
Descubrí hace tiempo que las bomber del desfile de Riot Riot Riot (F/W 2001) no eran de patronaje propio de Raf, sino que las compró y les cosió parches y las etiquetas de su marca por encima. Esas chaquetas son las MA-1 de Fostex Garments, las mismas que he usado yo.
Los logos que he usado son referencias tanto a Virginia Creeper (A/W 2002), Kollaps (S/S 2002) y Closer (A/W 2003) y para cerrar ya tanta fecha, salen el 12 de enero porque es el 56º cumpleaños de Raf Jan Simons.
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¿Tiene algún significado para la marca la frase “Someday All This Pain Will Be Useful” que figura en la bio de IG?
He implementado esa frase como el eslogan de la marca porque creo que los errores llevan a soluciones y con el paso del tiempo eso implica una mejora constante. Siempre habrá fallos y siempre habrán cambios pero no es nada malo. Una gran referencia para mí en este campo es Virgil Abloh. Todos los fallos que cometió con Pyrex, y cómo los solucionó, le llevó a evolucionar a Off-White.
¿Tienes alguna rutina para alimentarte creativamente? Cuentas de IG, revistas, películas, libros…
Consumo muchas cuentas de instagram y sobre todo páginas web de compra de ropa vintage, de scans de libros, de prototipos de marcas… Pero en general todo de diseño. Por ejemplo: Archivepdf, Grailed, Constant-Practice, @jerks.store, @unsoundrags, @sample____research y @blackbook.
Aun así, no tengo ninguna rutina establecida. Hay días que no sale absolutamente nada y otros que se me ocurren tres drops de golpe.
¿Qué quieres conseguir con Böse?
A corto plazo me gustaría que la gente pudiera encontrar Böse en algún punto de venta físico, no completamente mío, sino compartiendo espacio con otras marcas.
Para este año y el que viene quiero retomar corte y confección para las prendas ya que a largo plazo mi sueño es tener una nave industrial. Me encantaría llenarla de máquinas y gestionar mi propia producción y sobre todo la de otras marcas.
¿Cuál es tu opinión del marketing de influencers? ¿Crees que tiene una conversión real a ventas o es únicamente imagen de marca?
No creo que sea una mala técnica de promoción, pero depende mucho de a quien le envíes la ropa. Si es alguien que no conecta con tu marca o tienes que pagar a un influencer para que lo lleve no creo que esa historia o ese post vaya a convertirse en ventas. Puede ser que den los números de tu cuenta pero es mejor tener una conexión previa con esas personas y asegurarte de que no es un prenda más en su armario porque vinted ya está lleno de ropa #gifted #ad.
¿Cuál es el producto del que más orgulloso estás? Sea por el trabajo que hubo detrás o por el recibimiento de la gente.
Pese a que el drop de Böseciaga fueron las 48h más locas de mi vida y una experiencia increíble, de lo que más orgulloso estoy, es de todos los colorways de las trucker hats. Son las más básicas y más baratas. Es un básico que se puede usar todos los días y los que las tienen las usan muy a menudo (por lo que veo). Yo pienso que son como los box logos de Supreme pero de Böse.
¿Te preocupas mucho a la hora de determinar el precio de las prendas? ¿Crees que el fast fashion hace tener una percepción errónea del coste real de los productos para una marca emergente?
Poner los precios es lo que más me cuesta. Es difícil establecer un punto medio entre lo que crees que vale tu trabajo y lo que sería óptimo y asequible a día de hoy.
Siento que el fast fashion le ha quemado el cerebro a mucha gente porque no se puede esperar el mismo precio de una producción pequeña de 100 camisetas en España a una producción de 100.000 camisetas en China. Y no estoy entrando en temas morales y éticos, solo por números de producción el precio por coste es mucho menor cuantas más prendas haces y las marcas pequeñas no podemos luchar contra multinacionales.
¿Qué es lo más bonito de tener un proyecto como Böse? ¿Y lo más desagradable?
Sin ningún tipo de duda lo más bonito es ver a gente llevando mi ropa en persona o ver los outfits que suben a Instagram y ver cómo lo combinan.
Lo único de lo que me puedo quejar es de la gente que es desagradable conmigo por errores de empresas de envíos o fallos que pueda llegar a tener, pero por suerte han sido pocos.
Pregunta obligada, ¿cuál es tu recomendación para esas personas que quieren tener su propio negocio?
No soy una persona que pueda dar muchos consejos sobre negocios y empresas pero creo que antes que plantear “un negocio” hay que ir poco a poco, descubrir algo que puedas hacer y sobre todo lo que a ti te gustaría comprar. Porque si tú no gastarías dinero en tus propios productos, no le veo ningún futuro.