Daniel Chalmeta

Creator Partnerships, Meta

Top 10 de 2021 para Daniel Chalmeta

Están siendo años raros, no os lo voy a negar. Pero pandemias a parte, el 2021 ha sido un añazo para mí donde por fin me he sentido en casa, he atado muchos cabos, cerrado capítulos y, sobre todo, he sido muy feliz. Y esto último es lo más importante.

 

1. Viajar sin parar

Quien bien me conoce, sabe que me apasiona viajar. Pero este año viajé de una forma distinta: no planeé nada. Me fui a Paris un sábado y volví un domingo. Bajé a Valencia desde Madrid innumerables veces porque me apetecía, y no porque ‘tenía’ que hacerlo. Volví a Londres, me fui a Grecia (y al día siguiente a una boda en Málaga) y me recorrí Italia entera una vez más.

 

2. Bodas de mis mejores amigos

Me pasé el verano siendo el amigo soltero. Pero también asistiendo a bodas de esos amigos que solemos categorizar como ‘los de toda la vida’. Y por eso, el sentimiento y la felicidad son mayores. Qué feliz fui de tenerles y, sobre todo, de poder formar parte de uno de los momentos más bonitos de sus vidas.

 

3. Mykonos con ellos

Lo que fue un viaje que, por unas circunstancias especiales estuvimos a punto de cancelar a última hora, resultó ser uno de los mejores viajes de mi vida con dos de mis mejores amigos, Luis y Giovanni. Bailé y reí sin parar – tampoco tuvo mucho misterio. Pero fue muy especial el poder pasar tiempo con ellos viendo atardeceres y no las manecillas del reloj.

 

4. Amar mi trabajo

Llevo más de un año donde me gustan los lunes. Y esto no tiene precio.

 

5. Mi casa

He vivido la mitad de mi vida en muchos sitios. Casas que me han gustado más o menos e incluso compañeros de piso que he amado o he odiado – en estas cosas no hay término medio. En mayo me mudé a un lugar que por primera vez puedo categorizar como ‘hogar’. Y hablé de ello en AD, algo muy guay.

 

6. Vivir un poco más

Algo que a veces se nos olvida. Este verano hice un reset más que necesario. Os parecerá una tontada, pero, el marcar mis tiempos ha empezado a tener más sentido que nunca.

 

7. Volver a ‘casa’ – Londres

En marzo de 2020, después de quedarme atrapado en Australia y volver con un vuelo de repatriación (llamadme intenso), inicié mi despedida de Londres. Y no volví. Covid no lo puso fácil y yo dejé mi vida a medias, ya que tampoco pude despedirme de nadie. En octubre me fui unas semanas y recordé por qué adoro tanto esa ciudad y a los grandes amigos que todavía conservo allí. Y sobre todo, gracias a Adela por ser ese gran pilar.

 

8. Organizar menos

Y esto es algo que reitero constantemente. Con el paso de los años (y quizás porque viva pegado a un calendario de Outlook), me agobia más y más el organizar planes – e incluso que la gente lo haga. Así que este año he aprovechado el buen tiempo en Madrid para tomar copas y olvidarnos de los problemas por un rato. Take it easy.

 

9. Roma en bicicleta

Pues otro de esos planes que se decide una semana antes y termina siendo uno de los highlights de mi año. Con mi gente favorita, en una de mis ciudades favoritas. Ya no era verano, pero como si lo fuese – me atraqué a Saint Germain Spritz igualmente. Qué más da, estás en Roma.

 

10. Terminar el año en Capri

Y puse colofón al año con cuatro de mis mejores amigos viendo uno de los atardeceres más bonitos de mi vida en Capri. Comer hasta hartarse, sobremesas de cuatro horas, recorrer todo el sur de Italia en coche y, sobre todo, pasar tiempo con ellos. Con amigos que te hacen sentir en casa.

2022, bring it on!